Abr 24





Acto de la FUS, martes 24 de abril 2012.

Nuestra participación en el acto es en función de Generar Confianza en los Equipos de Salud y replantear nuestro respaldo al SNIS y su profundación.

En primer lugar, quiero agradecer en nombre de todos los usuarios a la FUS y al PIT-CNT, por la invitación a participar de este estrado. Hacer extensivo nuestro salud o para la FFSP, en el entendido de que usuarios de la salud somos todos.

Y decimos a todos los usuarios porque es a ellos a quienes representamos en la JUNASA ya que pertenezco al MNUSPP.

Junta Nacional de Salud que a nuestro entender debe recuperar su carácter de órgano donde deben ser tratadas y discutidas las políticas nacionales de salud. No debe ser un órgano meramente administrativo sino que allí se deben discutir por lo alto las políticas que ayuden a darle rumbo a la reforma, rumbo que hoy parece no tener o haberlo perdido.

A los que estamos hoy aquí, nos une el entender la salud como un derecho humano fundamental y el creer que es posible, justo y necesario luchar por una salud digna, accesible para todos y con equidad.

Hoy los usuarios entendemos que este proceso de reforma, que como todos dicen es largo y complejo, va muy lento. Los procesos se enlentecen o se aceleran de acuerdo a quienes lo llevan adelante y nosotros sentimos que la reforma de la salud, hoy ha sido bajada de cartel, no está siendo priorizada y no hay una voluntad política clara, nítida de desarrollarla y profundizarla.

Pero también los procesos se enlentecen o se aceleran de acuerdo a la participación, al empuje y al peso que puedan tener los directamente interesados, en este caso los usuarios de la salud. Y nos encontramos con que si la reforma de la salud no está siendo priorizada, mucho menos la participación social en ella. Es más, la participación social está siendo fuertemente cuestionada.

¿Será que no se ha entendido, que no se puede construir una reforma sustentable y sostenida sin que la ciudadanía la apoye y la haga suya? Y que para ello debe ser parte activa de esa construcción.

Estamos convencidos de que no se puede lograr una salud accesible y equitativa para todos, sin afectar poderosos intereses y corporaciones que monopolizan importantes áreas del sistema y que lo han mercantilizado profundamente.

Y también estamos convencidos de que no se pueden afectar esos intereses sin la participación activa y organizada de los usuarios y los trabajadores.

No queremos más verticalismos, ni políticas de salud construidas en un despacho, pensadas por algunos iluminados. Porque es imposible hoy construir un nuevo sistema de salud, sin la incorporación, el pensamiento y las necesidades de la población.

La Reforma de la Salud se convocaba a la participación allá por el 2005, de que los usuarios teníamos un rol fundamental a jugar. Así lo entendimos y decidimos organizarnos para hacerlo en forma responsable. Hoy de nuestra parte ya no hay marcha atrás. O participamos con voz y voto en los lugares que nos corresponden, o lo haremos saber cada vez que ese derecho a la participación no se respete.

Como sucedió con el número 5 de la revista de Presidencia dedicada a la salud, donde aparecen todos los actores menos los usuarios. Y cuando fuimos a preguntar por qué nuestro aporte no se publicó, se nos respondió que no había lugar. No hubo lugar para la opinión de los tres millones de usuarios.

De nosotros pueden esperar una actitud responsable como la que hemos tenido en medio de la crisis, actuando con madurez y ayudando a reconstruir confianza en el sistema y en los equipos de salud. Pero nunca esperen de nosotros que le hagamos el saludo a la bandera y que digamos o escribamos lo que quieren escuchar o leer.

Estamos comprometidos con esta reforma, la queremos desarrollar y profundizar, pero tenemos independencia de criterios, no somos furgón de cola de nadie y lo que entendamos que perjudica a los usuarios lo vamos a decir claramente, sólo a ellos nos debemos.

Si algunos hoy están arrepentidos de que los usuarios tengamos un lugar para la participación, ah nosotros lo lamentamos, no nos vamos a ir para nuestra casa.

Nuestro compromiso es con la construcción de ciudadanía promoviendo una democracia participativa, y eso se construye en la calle, en los barrios, en los pueblos, centro de salud por centro de salud, policlínica por policlínica., dando a conocer los derechos y también los deberes y saliendo a ejercerlos.

Porque nadie va a defender o a reclamar lo que desconoce y hoy hay un gran desconocimiento de cuáles son los derechos y los deberes que cada usuario tiene.

Y hubo que obligar, desde el poder ejecutivo a que todas las instituciones entregaran la cartilla de derechos y deberes de los usuarios.

Hoy estamos viviendo un momento de crisis de confianza por los lamentables hechos ocurridos. Hechos que una vez más lo decimos, son puntuales, pero las investigaciones deben continuar hasta las últimas consecuencias

Pero también entendemos que esa confianza se venía perdiendo desde hace mucho tiempo. Y la desconfianza mayor no era con enfermería, sino con la relación médico-paciente. Y esto no ocurre por un hecho puntual, sino por un largo proceso de uso y abuso de los vínculos de poder. Obviamente sin generalizar, porque en la vida estamos todos entreverados. No se trata de de que los buenos están todos de un lado y del otro todos los malos. Pero si que fue generando un mal relacionamiento por múltiples factores como el multiempleo, pero fundamentalmente por el abuso de poder.

Y como se dice que las crisis también abren oportunidades, es que estamos acá y apoyando la reforma. Porque sería fácil ponernos en la vereda de enfrente, pero con eso no se soluciona ni se construye nada.

Nosotros valoramos, respetamos el trabajo y la entrega del personal de salud. Es indispensable que entre todos comencemos una reconstrucción de la confianza, los actores que estamos aquí hoy y los que no están.

La confianza no se decreta, se construye día a día y eso conlleva acciones de todas las partes, acciones que deben estar basadas fundamentalmente en el respeto que todos nos debemos. Donde nadie es más que nadie y donde todos tenemos saberes diferentes, donde todos tenemos que estar en la búsqueda de las soluciones.

Porque creemos que es posible, porque la mayoría así lo quiere, por eso es que apostamos a construir confianza, hay que utilizar todas las herramientas de la mejor comunicación, y que esta sea clara, afable, humilde y respetuosa, Sin duda lo lograremos.

Muchas gracias.

(Ver archivo en PDF: Discurso en el acto de la FUS)


Movimiento Nacional de Usuarios de Salud Publica y Privada